jueves, 4 de octubre de 2007

Alcalá de Guadaíra

Alcalá vivió uno de sus momentos más trágicos el pasado martes cuando en media hora el pueblo quedó convertido en algo parecido a una montaña rusa de agua, aunque sin ningún atractivo. La fuerte lluvia caída en tan sólo media hora provocó que filas de coches se deslizaran calle abajo arrasando con todo aquello que se encontraban a su paso: escombros, otros coches y personas. Porque más allá de los gastos generados a raíz del desastre natural, calificativo empleado por el Gobierno para definir lo acaecido, están la vida de dos personas que la tromba de agua se ha llevado por delante.
Una joven maestra, madre de dos niñas y una anciana que se encontraba en su casa son las principales víctimas de la fuerza del agua. Bloques de hielo, granizo... hasta coches parecían caer del cielo. Impresionantes imágenes. Destrozos. Desolación. Histeria. Nervios. Calma tras la tormenta. Luto por las víctimas. Vuelta a empezar.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues sí que ha sido fuerte lo que ha pasado en Alcalá. Cuando las fuerzas de la naturaleza se empeñan en actuar puede pasar cualquier cosa. Ahora, como tú dices, a volver a empezar.

<< Ana >> dijo...

Hola Inma, pues como sabes soy de Alcalá de Guadaíra, y sí, lo del pasado martes fue una catástrofe, pero poco a poco vamos saliendo de esto... con la ayuda de todos. Desde aquí quiero agradecer la ayudad y colaboración de tantas y tantas personas, anónimas y no... ¡Juntos podemos salir de esta!