Me he dado cuenta de lo odiosas que pueden llegar a ser las esperas. Esperar un autobús que no viene, un mensaje que no llega, una llamada que tarda. Todo en esta vida parece girar en torno a eso. Y a veces cansa y lo acabas pagando con quien menos lo merece, muchas veces contigo misma. No tengo ganas de quedarme de brazos cruzados, por lo que creo que ha llegado el momento de tomar la iniciativa y que a partir de ahora sea el resto quien espere. Hay veces que te quedas ahi, pasmada, pensando que todo llegará. Y sí, llega, pero muy tarde y a veces nunca. Por eso he decidido tomar la inciativa yo. Ha llegado mi momento, como dice una canción de El sueño de Morfeo, y voy a cambiar las cosas. He dicho.
La Davis se viene para España
Hace 15 años